Llega el primer
ensayo de Ntra. Sra. la Virgen del
Rosario
Durísimo, muy duro. Donde uno se da cuenta uno de lo que es
un ensayo por derecho.
Kilos hasta en la boca y, sientes como el palo se te clava, pero se te clava de verdad.
Fuerte pa´rriba
siempre.
Me siento orgulloso
de estar junto a vosotros. Los que nos hemos dejado la piel. Los que
hemos estado apretando los dientes, los que hemos sufrido, pero sobre todo los
que hemos estado haciendo piña para que esto tire palante. Con todos los
nuestros, con mis hermanos costaleros. Veo como voy en el costero y tengo a mi
hermano al lado que va que no puede, y se me arrima para darme ese empujón que
me hace falta y abrazados por la cintura los dos y metiendo riñones salimos
hacia adelante.
Nos cuidamos y sobre todo lo más importante nos respetamos
La unión que consiguen los hermanos costaleros es el eje
vertebrador de la hermandad, es un acercamiento humano que ya quisieran muchas
instituciones para ellas. Por eso, esos abrazos tan efusivos. Hay que
comprender que tantas horas de esfuerzo compartido y
Dedicación al cabo del año trazan vínculos tan estrechos
que, a veces,
Superan los lazos familiares de la sangre. Se citan en sus
días de descanso por la sencilla
Razón de que están a gusto entre ellos y ejercen la caridad
en su
Sentido más extenso, borrando diferencias económicas,
profesionales
O académicas.
Dos Cuadrillas , 70 peones para portar A Ntra Madre De Dios Del Rosario.
A si me gusta repartiendo el trabajo ¡todos por igual!
Muy contento con la gente, por las ganas que le han puesto
y con las ropas que se van viendo
De vuelta las caras reflejaban la leña que había dado..
Ya estamos al lio señores, otra vez más, tendremos que
hacernos la ropa de nuevo, tendremos que volver a escuchar
¡ todos por igual valientes!, ó “ derecha alante ,izquierda
atrás “
Tengo ganas de vivir esto de nuevo otra vez.
ya solo pienso en apretar los dientes, dejar los zancos en
el suelo y siempre arriba con el.