¿Cuanta vergüenza se
necesita para hacer las cosas bien?.
Una Obra pagada con el dinero de los Salmantinos acaba en el
vestíbulo de la Policia Local de
Salamanca.
Dentro de donde había podido ir a parar es de los menos malos, puesto
que va a estar vigilado.
Las desavenencias entre las instituciones Catedralicias y
las Múnicipales son más que evidentes.
Entre tanto traslado y tanto montaje y desmontaje hay varias
piezas rotas.
Creyendo que cumplen con su deber, a más de uno sólo les satisface su ambición sin pensar en el
daño que se está haciendo
Algunas instituciones Ojalá tuvieran el talento de la gente
de la calle para saber con la misma precisión las medidas de vergüenza que
necesita hoy para ser medianamente coherentes.
La escultura de Honorio Astudillo, la cual se montó con
motivo del quinto centenario de la colocación de la primera piedra del
monumento, y que quedo expuesta en la Catedral Nueva ha sido retirada de la misma y llevada al
vestíbulo de las dependencias de la Policia Local.
Esta obra le ha llevado nueve años de trabajo al artista,
pues su creación tuvo lugar en el año 1982 hasta el 1991, desde esos momentos
ha estado expuesta en varios espacios de
Salamanca , el último fue en el convento
de Las Claras.
Esta gran obra está compuesta por más de trescientas piezas
y el material de cada una de ellas es puramente piedra franca de las canteras
de Villamayor, los mismos materiales que
forman la construcción de la Catedral de Salamanca.
Honorio Astudillo Sánchez nació en Salamanca. Realizó estudios de modelado y vaciado, talla en piedra y dibujo en la Escuela de Artes y oficios; fueron sus profesores Damián Villar, Alfredo Sánchez y Manuel Gracia. Lleva toda la vida trabajando la piedra, destacando en su tallado artístico. Además, ha trabajado como restaurador en prácticamente todos los monumentos de la ciudad. Entre las reproducciones en las que ha trabajo Astudillo se encuentran varias iglesias salmantinas como la de San Marcos, Santo Tomás Cantuariense, San Juan Bautista y San Cristóbal.