Gran fiesta del Resucitado de Peñaranda, en una procesión para la historia

Gran ambiente para recibir un año más a la 'procesión del Resucitado en Peñaranda” en un acontecimiento que tuvo un gran efecto llamada más allá de Peñaranda de Bracamonte

 La plaza de la Constitución volvió a presentar, como viene sucediendo en los últimos años, un magnífico ambiente de público para acoger la celebración la procesión del Resucitado, un desfile procesional que ha venido evolucionando desde hace  seis años y que en la actualidad  es cargada por costaleros,  un paso que ha ido aumentando en proporciones y en detalles y que a su alrededor viene acompañado por todo lujo de detalles propios de la más cuidada corporación y que  en Lo musical, que ayudó y mucho, fue otro ingrediente de calidad tras el paso del señor  la Agrupación musical Cristo Yacente de Salamanca.

Bajo las trabajaderas, los capataces  y auxiliares de la Asociación de Capataces y hermano s de paso Madre de Dios del Rosario de Salamanca igualaron a la cuadrilla, dándose la circunstancia que  lo hacen desde que sale a Costal.

Orgullo de un pueblo, de una gente y de una forma de ser genuina de la cofradía de Preciosa Sangre, que apuesta por el futuro y que Lo sucedido ya forma parte de la historia cofrade.

No cabe más que agradecer el esfuerzo de muchos por engrandecer lo que es la Semana Santa Peñarandina, Entre ellos a la familia Fuentes,  Donde se ve  el inmenso trabajo de la Hermandad, cuidando todos los detalles posibles

Cofrades de todas las hermandades arroparon a las dos imágenes protagonistas de la jornada, Jesús Resucitado y Nuestra Señora de la Soledad, que se encontraban en la plaza de la Constitución de Peñaranda. Las imágenes se han situado en el interior de la plaza, con los cofrades rodeándolas y los soportales abarrotados de público esperando el gran  momento de la procesión, alrededor de las  12 de la mañana, cuando se realiza el encuentro en la Plaza de la Constitución  entre la imagen del Cristo Resucitado y la de Nuestra Señora de la Soledad y después de recitar los versos de un niño vestido de San Miguel, patrón de la ciudad, se procede a retirar el manto negro de la Virgen, en medio de los aplausos del público.

Una vez anunciada  la Resurrección de Cristo, la procesión deja de ser de penitencia momento en que los cofrades se quitan el capuchón que tapa sus rostros y continúan el desfile hasta la parroquia ya a cara descubierta.

Nuestra Señora de la Soledad, estrenaba paso este año realizado en los talleres de Oscar Rodríguez  Fernández de Salamanca .